Cómo mejorar el espacio con una mini cocina emergente

Las cocinas ocultas son la solución ideal para pisos pequeños o estudios cuando el espacio limitado no permite una verdadera cocina o cuando quieres utilizar el espacio para zonas de estar o de dormir. En un estudio, pues, te permiten ocultar a la vista el espacio de la cocina y el resultado es un efecto final limpio, minimalista y despejado: de hecho, las minicocinas ocultas pueden fundirse con una pared o con un armario cuando está cerrado.

Aunque pequeñas, este tipo de cocinas son equipadas con todo lo necesarioplaca de cocción, fregadero, frigorífico, encimera y, en algunos casos, también es posible solicitar un pequeño lavavajillas. Pueden ser de distintos tamaños, pero por lo general no superan los 249 cm de longitud, precisamente porque es un elemento que no debe resultar demasiado voluminoso dentro de la habitación. En este artículo, descubrimos ideas, inspiraciones y ventajas de las minicocinas ocultas.

Mini cocina en el ático

Cuando las alturas no permiten colocar armarios altos, como en el caso de un ático, una cocina oculta sin armarios altos es la solución ideal: un mueble compacto con una placa de cuatro fuegos, un fregadero y un gran compartimento de almacenamiento.

No falta de nada y, cuando hayas terminado de cocinar, puedes cerrarlo todo transforma tu minicocina en una alacena clásica, de sólo 160 cm de ancho y 166 cm de alto, perfecta para que quepa hasta en una habitación abuhardillada con un techo especialmente bajo. Para dar un toque de vida a la habitación, puedes colocar una nevera de diseño de colores junto a la minicocina.

Minicocina en el pasillo

Las cocinas ocultas pueden ser integrarse incluso en un pasillo porque son especialmente delgadas: sólo tienes que tener cuidado de dejar suficiente espacio entre la cocina y la pared para que puedas moverte con facilidad incluso cuando las puertas estén abiertas y estés preparando la comida y la cena.

Si quieres ahorrar más espacio, puedes optar por una cocina con persianas en menos de 230 cm de longitud y sólo 60 cm de profundidad, puedes tener una cocina perfectamente equipada con placa de 4 fuegos, campana extractora con luz incluida, frigorífico de pedestal, fregadero con bandeja recogegotas y mueble bajo encimera con cajones, cajón y compartimento despensa.

Minicocina en la oficina

Una situación en la que una minicocina oculta puede ser especialmente útil es cuando se trata de amueblar una oficina. Muchos de nosotros trabajamos de la mañana a la noche, e incluso pasamos la pausa del almuerzo en la oficina, pero equipar una cocina adecuada puede resultar demasiado voluminoso, caro y laborioso.

Una minicocina con cierre de armario, de sólo 128 cm de largo, encajará perfectamente en la habitación gracias a su refinado diseño y a sus puertas que la hacen parecer un armario de verdad. Una vez abierta, tendrás dos quemadores para cocinar y calentar, un frigorífico bajo encimera, fregadero y escurridor.