Ideas para aprovechar las estancias menos utilizadas: vestíbulo y pasillos
Al elegir los muebles de la casa, a menudo se tiende a dejar para el final las habitaciones menos utilizadas y menos habitadas: entrada y pasillos suelen considerarse estancias transitorias y por eso poca gente les presta tanta atención como a la elección de los muebles del dormitorio, el salón y la cocina. En realidad, son dos estancias que pueden equiparse y aprovecharse de muchas maneras: el recibidor, por ejemplo, es la tarjeta de visita de tu casa y dice inmediatamente algo sobre tu familia y tu estilo, mientras que los pasillos pueden resultar un recurso de espacio extra y una forma de expresar tu creatividad.
Aquí tienes algunos consejos sobre cómo amueblar el recibidor y los pasillos para sacar el máximo partido a estas estancias de la casa, a menudo descuidadas e infravaloradas.
Cómo amueblar el recibidor
Diseña este espacio con cuidado porque será lo primero que veáis tú y tus invitados nada más entrar en casa y, ya sabes, ¡la primera impresión es la que cuenta!
Los muebles deben ser adecuados al estilo de la casa y al espacio disponible, sin incluir demasiados porque podrían asfixiar la habitación. También hay que prestar mucha atención a la iluminación: la entrada suele ser una estancia sin ventanas, así que coloca estratégicamente los puntos de luz e intenta aprovechar la luz natural de otras estancias, favoreciendo los colores claros para muebles, textiles y paredes. Además, el recibidor también debe ser funcional: pronto te darás cuenta de lo importante que es tener a mano todo lo que necesitas antes de salir.
Si eres un amante del estilo minimalista, puedes diseñar un vestidor a medida y no poner nada más en tu recibidor, o puedes pensar en un perchero con perchas y un estante para sombreros, quizá complementado con un arcón donde puedas sentarte para calzarte cómodamente. La consola también es un mueble que encontramos a menudo en el recibidor, práctico para guardar las llaves y el correo nada más entrar en casa.
Cómo amueblar un recibidor
El pasillo es un espacio que suele considerarse de paso y en el que el mobiliario se reduce al mínimo, precisamente para evitar que un desorden excesivo perturbe el tránsito.
Esto no significa que debamos dejarlo completamente desprovisto de mobiliario: en su lugar, podemos aprovechar este espacio con un armario a medida armario, con un juego de librerías hasta el techo o, si el espacio es especialmente reducido, con una estanterías de diferentes formas y tamaños. Lo importante es dejar espacio suficiente para pasar con facilidad.
En cuanto a la iluminación, puedes optar por apliques de pared o una lámpara colgante; es mejor evitar una lámpara de pie, que molestaría al pasar y haría la habitación más confusa.
Una forma original de personalizar el pasillo es decorar las paredes o la única pared que quede libre, si has utilizado una para los muebles. Puedes, por ejemplo, elegir un papel pintado que encaje bien con el estilo de la casa o pintar la pared y enriquecerla con muchos cuadros, grabados o fotografías en toda la pared.